El responsable de la Fundación IESE y hasta hace dos meses director en Madrid de la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra, el vallisoletano Juan José Toribio Dávila, resaltó ayer que España no ha sido el país más golpeado por la crisis económica, pero sí el que ha generado más paro, lo que se ha convertido en un nuevo obstáculo para que pueda remontar una situación de la que aseguró, «ya se ha tocado fondo», si bien el problema ahora puede ser una tasa de crecimiento prácticamente nula sin que se pueda adelantar durante cuánto tiempo y con qué intensidad. Toribio fue ayer el protagonista la segunda edición del Foro Económico de EL NORTE DE CASTILLA en Segovia.
Patrocinado por Caja Segovia, con la colaboración de la Federación Empresarial Segoviana (Fes), la Cámara de Comercio e Industria, el Ayuntamiento de Segovia y la Diputación Provincial, este espacio para el debate y reflexión sobre la situación económica contó en la mañana de ayer con las pedagógicas explicaciones de Toribio, quien tituló su charla: 'Afrontando la crisis: perspectivas?'.
Juan José Toribio (Valladolid, 1940) estudió en Harvard en la década de 1960, es doctor en Economía y ha sido director ejecutivo del Fondo Monetario Internacional, con sede en Washington; además fue director general de Política Financiera en el primer Gobierno de la Transición, de 1977 a 1979, economista del Banco de España y secretario técnico de La Caixa, entre otros cargos. Asimismo, participa desde hace años en una mesa-debate en el canal de televisión CNN+.
El experto aseguró que la crisis «ha tocado fondo», pero la recuperación podría dilatarse, por eso planteó aclarar «qué significa estar en el fondo, durante cuánto tiempo y cuáles son los riesgos de estar en el fondo», expuso al inicio de su charla, seguida por políticos y empresarios.
Dudas y más dudas
Resaltó que desde el comienzo de las dificultades económicas en España se han destruido dos millones de empleos, por lo que la tasa de paro es en la actualidad del 20,1% y podría alcanzar en breve, según las previsiones de los organismos europeos el 20,7%. «Un millón y medio de parados ya no cobran prestación y cerca de 1,2 millones de hogares tienen a todos sus miembros en paro. Esto explica -agregó- por qué razón en España sube el ahorro y baja el consumo, de manera que reactivar la economía exigirá reactivar el consumo, que supone el 61% del Producto Interior Bruto (PIB). Una solución complicada en esta situación de desempleo y de temor a la pérdida del puesto de trabajo en la que todo aconseja prudencia». A esto se suma la situación financiera española que, dijo, puede analizarse en función de su situación patrimonial. Depende de cómo se valoren sus activos: «Si tenemos en cuenta que muchos son heredados de ejecuciones de deudas y se valoran al valor rabioso del mercado, el sistema bancario está en quiebra», dijo tajante. «¿Pero es razonable valorar a precios de mercado? No», se respondió. «Si valoramos sus activos a precios de adquisición, la banca española es de la más saneada», agregó.
De manera que la situación real de la banca queda en manos del regulador, que decide en función de las provisiones que exige. «Si es demasiada, asfixiará al sistema, así que hay que hacerlo con prudencia y dejarlo en manos del supervisor, el Banco de España», argumentó. ¿Cual debe de ser ese equilibrio? «Pues no lo sé, y seguramente no lo sabe nadie», se contestó de nuevo. «Lo importante es saber si el sistema bancario es capaz de generar a corto plazo un flujo de crédito y ahora, lo que caracteriza a la banca española es su baja capacidad de generar beneficios», agregó.
Para complicar más las cosas, resaltó que tenemos un sistema financiero «con una cifra de negocio decreciente, porque la demanda de créditos ha disminuido, con activos heredados que no generan renta y que tiene problemas de liquidez porque no puede renovar sus vencimientos y que tiene la amenaza de unas mayores exigencias de capitalización» enumeró. «En estas condiciones, ¿quién puede reactivar el crédito?».
Cerrando el círculo
La situación en el fondo de la crisis se acompaña de un «déficit presupuestario como no se había conocido nunca en la historia de la economía», afirmó. «Estamos ante un problema cuyas consecuencias no sabemos calibrar ni tampoco cómo cubrirlas».
En su opinión, se ha llegado a esta situación por una mala valoración inicial de la crisis. «No supimos ver la medida y que comportaba el colapso de la recaudación tributaria, así que pensábamos que bastaría con aplicar los estabilizadores automáticos y, cuando esto no funcionó, nos inclinamos por los programas de gasto público; ahora hemos aprendido que el gasto público no era la solución, sino parte del problema», concluyó.
Juan José Toribio expresó sus dudas sobre las distintas iniciativas adoptadas por el Gobierno, que se basan en una reducción del gasto y una búsqueda del incremento de los ingresos tributarios, pero las crisis que han afectado a economías vecinas, como Grecia o Irlanda, han disminuido la confianza de los mercados en España, más ante la situación cada vez peor de Portugal, cuyos acreedores son precisamente los bancos españoles. «Hace falta un programa integrado y completo, no soluciones parciales», aseveró el experto, quien apuntó que ese programa de reformas debe incluir la del mercado laboral y de las pensiones, además de acelerar la reforma del sistema financiero, el sector energético, enseñanza, sanidad, la financiación de las corporaciones locales o la justicia. «La dirección de esas medidas viene determinada por problemas mundiales que nos dicen lo que hay que hacer», finalizó Juan José Toribio.
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España no es el único país que está en crisis, también lo están otros países ccomo Irlanda o Grecia. Eso sí, nosotros somos el país que más indice de paro tiene.
ResponderEliminarEsto es preocupante.