España tiene el potencial para convertirse en un socio privilegiado de Corea del Sur, país que no ve en la actual crisis económica un obstáculo sino una oportunidad para la inversión y el incremento de los lazos bilaterales, según han explicado hoy representantes diplomáticos surcoreanos.
En una conversación con varios medios de prensa internacionales acreditados en Madrid, entre ellos Efe, el embajador de la República de Corea en España, Cho Taeyul, ha descrito los resultados de la cumbre del G-20 en Seúl y ha destacado el momento actual para las relaciones de su país con España, que este año cumplen el 60 aniversario de su establecimiento.
Cho ha recordado que el actual Gobierno surcoreano impulsó la participación de España en la cumbre del G-20 celebrada la semana pasada, como invitado especial junto a otros cuatro Estados por su papel clave en el mapa de la Unión Europea a pesar de la actual coyuntura económica.
Esta crisis, ha señalado, "es vista por las empresas coreanas más como una oportunidad que como un obstáculo", y puso como ejemplo a la industria automotor, que mira con especial interés a este país.
Cho ha puesto como ejemplo el acuerdo suscrito ayer por la división de vehículos industriales de la empresa surcoreana Hyundai con la firma española Bergé Automoción para implantarse aquella en Europa, en una operación definida como de gran calado estratégico.
"Europa es muy importante para Corea por sus valores democráticos y su economía", ha dicho Cho, quien ha insistido en las posibilidades de España para reforzar el "flanco sur", junto a Italia, de la estrategia inversora y comercial surcoreana en el viejo continente.
No obstante, ha indicado, es preciso reforzar los lazos entre los dos países, "que comparten algunos problemas, como el del reconocimiento mutuo de su respectiva imagen".
Cho ha manifestado que es preciso ir "más allá" de los tópicos que coreanos y españoles tienen unos de los otros y sobre todo se debe difundir el conocimiento del respectivo potencial económico, de cara a eventuales ofensivas empresariales.
En Corea del Sur "no se tiene una visión completa de España. Falta ese aspecto económico", ha destacado.
El embajador surcoreano en España también ha aprovechado para valorar los intercambios culturales y recordó el gran interés que en el idioma español existe en Corea del Sur, donde, ha asegurado, está el mayor número de hispanistas de Asia y donde, proporcionalmente, hay más estudiantes de la lengua española en ese continente.
En este sentido, ha lamentado que se esté demorando la apertura de un centro del Instituto Cervantes en Seúl, a pesar de que esa promesa ya se ha cumplido recientemente en capitales y ciudades asiáticas no muy lejanas, como Tokio, Pekín o Shanghái.
Cho ha mostrado su confianza en que una eventual visita en 2011 a Seúl del rey Juan Carlos (prevista para septiembre pasado y suspendida por razones de salud del monarca) impulse las decisiones encaminadas a la apertura del Cervantes en la capital surcoreana y ha confirmado la inauguración el próximo año en Madrid de un Centro Cultural de Corea en España.
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